MecanismoS DE defensa DE LA PERSONALIDAD
A medida que se desarrolla la personalidad, la persona aprende mecanismos para descargar sus impulsos y adaptarse a la realidad, reduciendo la ansiedad que las frustraciones y los conflictos pueden generar. Estos mecanismos o métodos son empleados por las personas para favorecer la adaptación del sujeto a la realidad externa e interna. En las personas afectadas por la psicosis estas defensas se vuelven ineficaces, rígidas, restrictivas y desacordes con la situación.
A continuación se describen algunos de estos mecanismos:
Represión: Consiste en rechazar fuera de la conciencia pensamientos, impulsos o acontecimientos que resultan penosos, dolorosos o inaceptables para la persona. Aquello que se reprime queda relegado en el inconsciente aunque puede manifestarse en forma consciente.
Proyección: La persona proyecta cualidades, deseos o sentimientos que le producen ansiedad, fuera de sí mismo, a quien se los atribuye totalmente. Este es el mecanismo que pone en marcha las personalidades paranoides.
Racionalización: La mayor parte de nuestros actos tienen más de una motivación. Mediante la racionalización escogemos aquellos motivos que justifican nuestros actos, sin crear conflictos éticos-morales, reduciendo la ansiedad provocada por una determinada conducta.
Fantasía o negación de la realidad: Consiste en realizar y lograr de forma imaginaria aquello que difícilmente se podría alcanzar en la realidad.
Compensación: Consiste en compensar un área deficiente o frustrada destacando otra. Puede presentar varios grados, a saber, en uno los esfuerzos se centran en equilibrar el fallo o insuficiencia; en otro, se desarrollan otras capacidades, y el último aparenta más de lo que se es.